Las plaquetas liberan los  factores de crecimiento  que se encargan, fundamentalmente, de estimular la regeneración celular, aumentar la formación de nuevos vasos sanguíneos y producir nuevo tejido. Es decir, activan el organismo en la zona donde se liberan ayudando a reconstruir el tejido dañado, efecto reparador que se aprovecha para rejuvenecer la piel.

Uno de esos factores, el llamado factor de crecimiento epidérmico, fue el primer polipéptido aislado y caracterizado como factor de crecimiento y es capaz de inducir la proliferación de queratinocitos y fibroblastos, estimular la angiogénesis y aumentar el grosor de la piel, devolviéndole su elasticidad y firmeza, además, aumenta la vascularización de la zona donde se aplica, favoreciendo la aparición de nueva piel, disminuyendo los efectos sobre la misma de la oxidación celular y eliminando las arrugas.

Los factores de crecimiento: Regulan funciones esenciales para la regeneración, remodelación y reparación de los tejidos, y además:

  • Tienen la capacidad para atraer y orientar a las células hacia el lugar en que son necesarias
  • Actúan en la división celular para producir células nuevas
  • Favorecen el desarrollo de nuevos vasos sanguíneos
  • Activan la síntesis de la matriz celular
  • Aumenta el grosor de la epidermis
  • Recuperación de su consistencia elástica
  • Mejoría de la revascularización
  • Mayor tersura de la piel
  • Excelente tratamiento en combinación con ozono en artrosis y otras patologías osteoarticulares
  • Además favorecen una repitelización más rápida, disminuyen las molestias que sufre el paciente y mejoran los resultados de los distintos tratamientos.

Pero lo que también supone una gran ventaja es que al ser autólogos, es decir, extraídos del propio paciente, no producen alergias, rechazo o contagio de enfermedades. Esto permite afirmar que en principio no existe ninguna contraindicación absoluta , ya que lo que se utilizan son proteínas del propio paciente. Por eso es útil para cualquier persona, independientemente de su edad o condición y casi para cualquier disciplina médica, incluida la estética.